Paciencia

Hace poco les hablaba de esas entradas que por algún motivo se quedan archivadas y nunca llegan a ver la luz. Y últimamente escribo muchas de esas. Letras cargadas de despecho, de dolor (si pensaban que ya habían leído todas mis miserias, créanme, no saben ni una décima parte). 

¿Por qué lo hago? ¿Por qué después de cargar dardos envenenados no los lanzo al ciberespacio sin más? Supongo que porque el simple hecho de escribir me resulta terapéutico y una vez hecho, ya no siento la necesidad de que nadie lo lea, porque para mí ya es suficiente.

Hace unos minutos he terminado una entrada que rebosaba dolor, hay días en los que me levanto así, empapada en sudor y rabia y deseando cargar contra quien sea con tal de desembarazarme de esa sensación. No obstante, una vez escrita y releída, he considerado que no necesito soltarla, ya ha cumplido su función.

Y es así como funciono últimamente, lidiando conmigo misma, viendo venir los malos momentos y dejando que pasen sin golpear con ellos a nadie más. Porque no es necesario hacerlo.

Todo forma parte del aprendizaje, de crecer y de convertirme en la persona que quiero ser, en lugar de seguir siendo esa versión de mí misma que pagaría por borrar.

Poco a poco, me digo. Paciencia.

1 comentarios:

  1. La paciencia no sirve de nada querida. Dispare a todo lo que se mueve... es mucho mas divertido.

    Siempre suyo
    Un completo gilipollas

    ResponderEliminar

 
Tinta Invisible Blog Design by Ipietoon